Hoy en día, los automatismos domóticos están sustituyendo a muchos de los mecanismos estándar que hemos conocido hasta ahora, lo que nos permite el máximo control de la carga eléctrica que se puede controlar.
Gracias a la domótica podremos gestionar infinidad de tareas en nuestro hogar, como por ejemplo accionar el riego del jardín, encender las luces, subir las persianas… y todo ello aunque nos encontremos a miles de kilómetros, con nuestro dispositivo móvil y con toda la seguridad posible.
Todas estas y muchas otras comodidades que podemos conseguir para nuestro hogar son gracias a unos dispositivos llamados actuadores, imprescindibles en una instalación de estas características.
¿Qué es un actuador?
Se trata de un dispositivo que realiza la acción solicitada desde el controlador domótico, sobre un elemento específico de la vivienda, bien sean puertas, luces, calefacción, aire acondicionado, persianas, sistemas de riego…
En el mercado podemos encontrar un gran número de actuadores diferentes y modelos relacionados directa o indirectamente con la domótica para hogares, como por ejemplo los actuadores hidráulicos, eléctricos y neumáticos entre otros.
Actuadores hidráulicos
Se encuentran entre los más antiguos hoy en día; funcionan mediante fluidos a presión y éstos son clasificados según la forma de operación.
Eléctricos
Si se compara con un actuador hidráulico, la estructura de éstos es mucho más simple de lo que pudiera parecer en un principio, dado que lo único que necesitan para funcionar es acceso y alimentación de la red eléctrica.
Una de sus grandes ventajas es que resulta muy versátil debido a que utilizan cables eléctricos para transmitir tanto las señales como la electricidad. Además, no existe ninguna clase de restricción en cuanto a la distancia entre el propio actuador y la fuente de energía.
Neumáticos
En este caso nos encontramos con mecanismos que tienen la capacidad de convertir la energía del aire comprimido en trabajo mecánico, aunque este caso no se suele utilizar a nivel doméstico y suele ser más habitual a nivel industrial. En cierta forma guardan ligera similitud con los actuadores hidráulicos, aunque la compresión es mayor.
Hoy en día no se concebiría el concepto de la domótica sin los actuadores, por eso tienen tanta importancia en esta plataforma y son usados en todos los niveles, tanto en el hogar, edificios o en industrias.
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